Nuestro Decálogo
Décalogo del estudiante de derecho, con especial dedicatoria a los que estudian para sustentar el Examen Técnico Profesional.
Cursos Fase Pública Cursos Fase PrivadaEl mencionar la palabra estudiar debe llenarte de orgullo.
Décalogo del estudiante de derecho, con especial dedicatoria a los que estudian para sustentar el Examen Técnico Profesional.
Cursos Fase Pública Cursos Fase PrivadaEl mencionar la palabra estudiar debe llenarte de orgullo.
Por Omar Ricardo Barrios Osorio – Director CEDE
Para alcanzar de forma óptima una meta debes planificar adecuadamente, por lo tanto la actividad de estudiar debe estar encaminada a cumplir un fin; tu escoges tus objetivos: – si es ganar un examen, graduarte o si es convertirte en un profesional de derecho.
Todos los días, todos los días y con actitud; lee, subraya, anota, resume, esquematiza, mapas, mentales, etc. Y después vuelve a estudiar y sigue estudiando, es la única forma de seguir aprendiendo para crecer y después con ello ejercer y construir.
No estudios para una pregunta, para un cuestionario o para un examen, estudia para formarte como un profesional, estudia para tener el conocimiento y aplicarlo como corresponde; ningún conocimiento podrá ser útil si el mismo no se basa en principios y valores (Lee el Código de Ética Profesionales que será tu guía).
Esta profesión necesita de entrega y dedicación porque nuestro aprendizaje dejará huella.
Todos tenemos capacidades y limitaciones, identifica las tuyas y has de tus atributos y cualidades tu fortaleza y lucha por tus inconvenientes tengan el menor efecto posible en el estudio (La actitud es un buen punto de partida).
Los recursos de los que dispones libros, leyes, papel, computadora, impresora, internet, no están siempre a vuestro alcance y aún si tuvieras la oportunidad de contar con todos debes de optimizar cada uno y no desperdiciar, incluso el medio ambiente lo agradecerá (ten tu guía o programa de estudio a la vista).
La mayor inversión a realizar es el tiempo traducido en horas de estudio pero será recompensada con intereses inimaginables. Los demás gastos en libros, leyes, materiales y otros recursos debes hacerlo priorizando.
Para poder entender nuestra doctrina, legislación y jurisprudencia debes de conocer dónde vives, dónde aplicarás tus conocimientos; fíjate en el año de cada ley para comprender el contexto al momento de su promulgación y en especial conoce tu Constitución Política de la Republica de Guatemala, y ten presente que las personas de Guatemala son únicas (observa).
Nunca debes ser conformista, duda; si tiene incertidumbre o no compartes un criterio investiga, verifica otros puntos de vista o corriente y cuestiona e interroga, deja que tu “instinto jurídico” vaya creciendo conforme vas discutiendo, argumentando o resolviendo (no te preocupes por equivocarte ahora ¡contesta!… pero mañana debes acertar).
Alguien determinó los conceptos, estableció las definiciones y aplicó las instituciones… ¿Por qué tú no puedes hacerlo? No olvides que los grandes del derecho fueron estudiantes igual que todos y por cierto siguen estudiando, por eso son grandes.